Quilmes perdió la final ante Olimpo y se coronó sub campeón.
El conjunto cervecero cayó anoche ante Olimpo de Bahía Blanca por 2 a 0, en el partido final de la Copa Ciudad de Tandil , cuadrangular amistoso disputado en la ciudad del mismo nombre.
Quilmes hizo un buen primer tiempo y fue superior a su rival, pero en la segunda etapa cometió errores que le costaron dos goles y terminó perdiendo con justicia.
Los de Bahía Blanca controlaron bien la pelota y El Cervecero no pudo generar peligro.
El partido comenzó con un Quilmes que fue a buscar de entrada, aunque Olimpo no se quedó atrás y también salió.
Era El Cervecero el que mostraba mayor claridad, comandado por Adrián Giampietri, quien encabezaba todos los ataques, y con un importante trabajo ofensivo de Germán Alemanno y Diego Sequeira en la derecha, desbordando constantemente.
Antes que se cumpliera el primer minuto lo tuvo El Máquina , con un remate de media distancia, y el arquero Leonardo Cauteruchi manoteó la pelota por arriba del travesaño.
Un rato más tarde y tras un desborde por la derecha de Germán Alemanno, lo perdió Esteban García, rematando por arriba desde el borde del área y con el arco vacío.
Quilmes tocaba mejor la pelota y llegaba con más gente al área rival, generando peligro.
GOL MAL ANULADO. Así fue cuando a Diego Ceballos le anularon mal un gol por un offside inexistente o cuando sobre la hora Raúl Gorostegui la tiró por arriba tras recibir luego de otro desborde de Alemanno.
Olimpo, en cambio, llegó solamente con remates de media distancia. Fue Leonardo Ulloa quien remató en tres oportunidades desde afuera del área, dos tapó Marcelo Pontiroli y una dio en el palo derecho del uno. Los dos se repartieron el dominio del balón, aunque Quilmes lo distribuyó mejor.
La primera etapa se terminó con un empate que hasta ahí era justo, pero que dejaba la sensación de que El Cervecero había sido algo más.
CAMBIOS, ERRORES Y ADIÓS COPA.
En la segunda etapa el entrenador cervecero Alberto Fanesi decidió darles minutos de juego a futbolistas que venían jugando poco, como Sergio Marclay, Juan Olivares y Dante Senger.
El problema fue que sacó a los tres que más participaciones en ataque habían tenido y que más peligro habían ocasionado: Giampietri, Ceballos y Alemanno.
Entonces, fue Olimpo el que comenzó a manejar más y mejor la pelota, empezando a meter al Cervecero contra su campo. Y a los 2 minutos, una desatención defensiva terminó con Ulloa bajándole una pelota a Javier Robles, que dejó en el camino a Andrés Manzanares y definió sobre la salida de Pontiroli: 1 a 0. Y a los 15 minutos, segundo error y segundo gol. Héctor Sosa entregó mal una pelota saliendo del fondo, Ulloa la robó y habilitó bien a Leandro González, que se fue mano a mano con Pontiroli y definió suave contra el palo izquierdo del uno: 2 a 0. Y si bien quedaba media hora, el partido se terminó ahí. Porque Olimpo puso el juego en el freezer, manejó los tiempos y la pelota con total tranquilidad. Quilmes intentó ir a buscar inútilmente, sin generar demasiado peligro salvo con centros y algunos cabezazos, como uno de Manzanares y dos de Senger. Los ingresos de Damián Musto por Sequeira y de Gastón Schmidt por Gorostegui no modificaron nada. Olimpo fue el dominador de la segunda etapa, aprovechó los errores del Cervecero y ganó bien el partido.
